¿Cuántos mayores de 25 no terminaron la escuela primaria en Caba? Las estadísticas sorprenden. El censo 2010 (el último realizado) arrojó un 13,1 %, promediando todas las edades. Un 6,6 % en la población de 25 a 29 años, que se va incrementando hasta trepar a 32 % en los mayores de 80. En el grupo de mediana edad (40 a 49 años) casi un 10 % de las y los porteños no habían terminado la primaria en el 2010. Para abordar esta falencia el Ministerio de Educación de la Ciudad despliega una oferta de escuelas destinadas a adolescentes y adultos que funcionan en horario vespertino en las primarias infantiles. Son 81 en total y una de ellas es la escuela 5, D.E. 16, Gabriela Mistral, de Villa Devoto.
“Mucha gente desconoce que hay una oferta educativa pública, gratuita, a la que tiene derecho a acceder, especialmente para terminar la primaria, pero también para tomar cursos”, revela Pablo Carchano, director de la escuela 5. “Tenemos anécdotas de vecinos de esta manzana que no sabían que acá funcionaba una escuela para adultos. Y no un caso solo, mucha gente en un rango de diez manzanas a la redonda no sabía de la existencia de la escuela”, resalta el directivo.
“A los adultos hay que ir a buscarlos”
La Gabriela Mistral tenía muy poca matrícula hasta hace unos años, “principalmente por la falta de conocimiento de la institución en el barrio”, subraya su director. En el 2018, año en que él asumió la conducción, comenzó una estrategia intensiva para revertir la situación. Junto a un equipo docente comprometido se cargaron al hombro la difusión.
El Ministerio de Educación los proveyó de unos banners con forma de obelisco, que distribuyeron en espacios de gran circulación cercanos al establecimiento, y no tan cercanos también: en los Cesac, en hospitales públicos, en estaciones de trenes, en los supermercados. Además, las y los docentes salieron a volantear cada diciembre y cada febrero. Y en las manzanas aledañas no hubo casa o edificio en los que los vecinos y vecinas no hayan encontrado un folleto pegado con cinta adhesiva en su puerta. Así lo hicieron hasta que la pandemia puso freno a estas estrategias. Entonces echaron mano al whatsapp y las redes sociales.
“Todo eso generó un movimiento enorme de gente que se acercó a la escuela”, cuenta Carchano, “el año pasado llegamos a tener más de setenta inscriptos en la primaria, cuando antes hubo años con solo cinco alumnos. En 2020 egresaron 22 personas, fue todo un récord”, dice con satisfacción.
“¡Uy, si yo me hubiese animado antes!” es una frase que se repite en las clases de adultos. José Sánchez es docente hace cuarenta años y lleva veintiocho enseñando a gente grande, los últimos dieciséis en esta escuela. “El adulto cuando no sabe leer y escribir se cierra mucho, tiene vergüenza, siente temor a equivocarse, eso afecta hasta su postura corporal”, describe el maestro. “Después las cosas se van relajando, gana en confianza”, dice, y agrega que “es muy valioso el trabajo de difusión que impulsaron desde la dirección, porque a veces al adulto para que se decida, hay que irlo a buscar.”
En el aula
La primaria para adultos está diseñada para cursarla en tres años como máximo, en el caso de la gente que la empieza sin saber leer ni escribir. Otras personas pueden completarla en pocos meses.
“En el aula hay gente con realidades muy diversas”, afirma Carchano. “Tenemos desde alumnos que no están alfabetizados, hasta otros que nunca pisaron una escuela pero saben leer y escribir. También hay gente que empezó la primaria pero no la terminó, gente que la terminó pero no tiene el certificado y no lo está pudiendo conseguir. Hay quienes quieren ingresar a la secundaria, pero como pasaron muchos años sin estudiar, no tienen los conocimientos para poder arrancarla inmediatamente. También se acerca gente extranjera, que terminó la primaria en su país de origen pero no tiene los papeles legalizados.” La escuela contempla este amplio abanico de realidades y a cada persona la acompaña en lo que necesita. También las edades son muy variadas, con alumnos que van desde los catorce años hasta adultos mayores de sesenta.
El director destaca “el gran equipo” que forman con los docentes. Explica que suelen trabajar con el sistema multiciclo: los alumnos y alumnas de diferentes niveles se reúnen en un mismo espacio, “se trabaja con las necesidades de cada uno, sus capacidades y conocimientos, con propuestas que en principio son iguales para todos y luego demandan distintos niveles de exigencia para cada uno.”
Los cursos
Estas escuelas públicas para adolescentes y adultos ofrecen, en paralelo a la primaria, cursos de uno o dos años de duración. La oferta varía en cada establecimiento. En el caso de la Gabriela Mistral hay cursos más enfocados a la salida laboral (electricidad, computación, corte y confección, cosmetología, peluquería), otros al arte (folclore y artesanías) y también hay un curso de idioma inglés. Las propuestas se van adaptando según la demanda de vacantes. Todos están certificados por el Ministerio de Educación de Caba. ♦
Escuela para adultos Gabriela Mistral
Dirección: José León Cabezón 3446, Villa Devoto.
Whatsapp: 11 4574-5188
Facebook: PrimariaAdultosGabrielaMistral
Blog: escuela5de16adultos.blogspot.com
Buenas tardes, quisiera inscribirme para el año que viene en el curso de inglés o computacion. Serían tan amables de decirme cómo hacer para hacerlo? Muchísimas gracias.
Hola Concepción, al final de la nota está el contacto de la escuela. Podés ir personalmente en el horario vespetirno o llamar por teléfono. Dirección: José León Cabezón 3446, Villa Devoto. Whatsapp: 11 4574-5188 ¡Suerte!