«Todo el mundo me pregunta si jugamos al TEG, al estanciero, al ajedrez, a las damas o al backgamon. Y esa no es la idea, la idea es empezar a conocer juegos modernos”, anticipa Leonardo Kuntscher, el dueño de Misterix.
Cada sábado a las 17 horas comienza una nueva partida. Jugadores principiantes o experimentados, todas y todos están invitados.
VV: ¿De dónde surge la idea de organizar estas tardes de juego de mesa?
Leonardo Kuntscher: Ya hace años tenía algunos juegos en vista que quería jugar pero no encontraba con quién. Entonces, cuando abrí la librería, dije “bueno, podemos sumarle la tarde de juegos”. La mesa en la que jugamos la diseñamos especialmente. Tiene una especie de tapa falsa: uno puede dejar el juego en la mitad, cerrarla y continuar la partida más adelante. También tiene luz y otros agregados como apoya-vasos para asegurarnos que no se derramen líquidos sobre los juegos. O sea que adaptamos la librería a los requerimientos de un lugar para jugar.
VV: ¿Cómo son esos juegos modernos?
LK: Algunos son de estrategia, de dominación (por ejemplo un mapa que se debe dominar). Otros son con puntos, más parecidos a los videojuegos, otros son de administración de recursos y otros son cooperativos. Pero su característica común es que están equilibrados. Muchos juegos que ustedes deben conocer, por ejemplo el Monopoly, están desequilibrados. Es decir que si vos tenés una estrategia pensada previamente podés ganar siempre, eso habla de un juego mal diseñado.
«Su característica común es que están equilibrados. Muchos juegos que ustedes deben conocer, por ejemplo el Monopoly, están desequilibrados. Es decir que si vos tenés una estrategia pensada previamente podés ganar siempre, eso habla de un juego mal diseñado.»
Además los juegos modernos son asimétricos. Significa que cada participante juega de una forma particular. Algunas reglas se comparten y otras no. Es mucho más divertido y te agiliza la mente para pensar estrategias: al mismo tiempo que vas tomando decisiones para ganar, tomás otras para evitar que el otro gane.
VV: ¿Podés nombrar algunos?
LK: El que más jugamos es el ROOT, que significa raíz. Es un juego del 2018 en el que hay facciones de animales en un bosque y el objetivo es ganar puntos. Se juega de a cuatro, todos contra todos. El tablero es bastante acotado pero sin embargo las posibilidades son infinitas, tantas que en un momento decís “hago esto y no pienso más porque sino se me quema la cabeza”.
Nuestro juego insignia es el Dune, que se juega de a seis. Es heredero de la novela de Frank Herbert, salió a la venta en 1979 y todavía se sigue editando. Cumple todas las características de un buen juego: está perfectamente equilibrado y es asimétrico: cada facción hace cosas muy particulares. Hay muchas traiciones, alianzas, recrea muy bien lo que sentís cuando leés la novela o ves la película. A nivel estratégico te requiere un esfuerzo: a veces es mejor no hacer nada, pero eso te exige saber controlar tus ansias de dominación.
Después otro es Insondable, un juego cooperativo que recrea el mundo de Lovecraft. Hay uno de cartas, el Arkham Horror, que también es cooperativo y se puede jugar de a cuatro. Es un juego que se está editando ahora, en el que podés ir comprando cartas para agregar a tus mazos. Pero no es que cada jugador puede mejorar su mazo como el Magic (y entonces el que tiene más plata para comprar cartas tiene más posibilidades de ganar). En el Harcan Horror todos compartimos las cartas y las nuevas se agregan al juego, no a los jugadores por separado. Así se vuelve más desafiante, se agregan nuevos escenarios según las cartas que le vas incorporando.
VV: ¿Cómo fuiste armando tu ludoteca?
LK: La mayoría de estos juegos vienen de España, los tenés que encargar a importadores. Vamos comprándolos en la medida que nos da el presupuesto. Estamos en un momento en que hay inflación no solo acá sino también en España, así que voy haciendo lo que puedo.
También hay gente que trae sus propios juegos y hay gente que incluso trae juegos que diseña para testearlos. En esos casos usamos un pizarrón donde vamos anotando las cosas que pensamos, ideas que se nos ocurren para mejorarlos.
VV: ¿Aceptan jugadores a partir de qué edad?
LK: Catorce años en adelante. Sobre todo porque hay juegos en los que se necesita tiempo para entender todas las reglas. Seguramente haya chicos más chicos que también los puedan jugar, no quiero prejuzgarlos, pero tenés que estar muy atento y eso es algo que hoy en día a veces a los más chicos les cuesta.
Para terminar te cuento una frase de cabecera que tenemos: “quien juega para ganar tarde o temprano va a perder, quien juega para aprender, tarde o temprano va a ganar”.♦
Sábados de juegos en Misterix
Horario para aprender a jugar: 15 a 17 hs
Horario para jugar: 17 a 20 hs.
Dirección: Cuenca 2393
Whatsapp: 11 6941-8261
Instagram: @misterixhistorietas
