La agrupación vecinal “Devoto Unido” está organizando encuentros con especialistas, durante tres sábados de junio, para “entender” qué es lo que está pasando en el barrio, ya que cada día descubren una demolición nueva de casonas antiguas situadas cerca de la Plaza Arenales.
Según relataron a Vínculos Vecinales, están preocupados por la “sumatoria de fenómenos” que se suceden desde que en 2018 fue aprobado en la Legislatura porteña el Código Urbanístico (CUr): la nueva norma habilitó edificaciones en altura que alteran la fisonomía de los barrios y empobrecen la calidad de vida.
En Devoto, la multiplicación de construcciones nuevas está acompañada por la apertura de locales gastronómicos –liderados por reconocidos chefs argentinos y extranjeros– que atraen a clientes de toda Caba y del Gran Buenos Aires cada noche, en especial, los fines de semana. “El barrio dejó de ser nuestro, no es más el Jardín de la Ciudad. Hay un crecimiento exponencial con una infraestructura que no está preparada”, se queja María, integrante del colectivo barrial que también es conocido como “Basta de Destruir Devoto” por el nombre de su cuenta en redes sociales.
La movida que generó el publicitado “Distrito del Vino” complicó también la rutina de los vecinos y las vecinas: ahora tardan mucho más en llegar a sus casas debido a la gran cantidad de tráfico. También les trastornó el sueño la contaminación sonora, porque las voces de quienes están en las veredas y la música de los locales continúa hasta la madrugada.
“Si Antonio Devoto hoy estuviera vivo, creo que estaría muy enojado de ver cómo reemplazaron todo el verde por cemento y arruinaron el barrio”, lanza Pilar, otra participante del grupo, en referencia al inmigrante italiano que llegó a la Argentina en 1850 y décadas después fundó Villa Devoto.
En la Justicia y la Legislatura
Desde que se unieron, estos vecinos tendieron puentes de comunicación con funcionarios del GCBA y legisladores porteños para intentar frenar la oleada de construcciones. Ansían alcanzar la meta a la que llegaron los vecinos de Bajo Belgrano y Lomas de Núñez, cuando en 2022 lograron que el Parlamento sancione modificaciones a algunos artículos del CUr que bloquean los permisos para las edificaciones en altura en polígonos de esos dos barrios. Con el mismo objetivo, en noviembre del 2022 los de Devoto Unido presentaron en la Legislatura su propio proyecto de modificación al CUr. El expediente se encuentra en la Comisión de Planeamiento, hasta ahora sin tratamiento.
También iniciaron en la Justicia una acción de amparo colectiva solicitando una medida cautelar que frene al Gobierno de la Ciudad en lo que respecta al otorgamiento de autorizaciones de obras en el barrio. Aún esperan una respuesta.
Entender qué pasa: las charlas en el Castillito
Mientras esperan que la Legislatura y la Justicia accionen en su favor, llevan adelante en “El Castillito” -la sede de la Sociedad de Fomento del barrio-, los encuentros con especialistas. El primero fue el sábado 3 de junio y estuvo a cargo de Norberto Malaguti, presidente de la Junta de Estudios Históricos de Villa Devoto, y de Natalia Karbabian, una arquitecta que desde su cuenta de Instagram @ilustroparanoolvidar publica “registros de memoria” de hermosas casas y edificios de la ciudad de Buenos Aires que fueron demolidos recientemente.
“Me interesa generar un diálogo en el cual la ciudadanía comience a entender qué le pasa con todo esto y pensemos cómo podemos accionar”, dice Karbabian a Vínculos Vecinales. A su entender, ese “borramiento del paisaje en el que se deja de ver el barrio afecta las fibras más sensibles. Las personas ven trastocada su memoria cuando van despareciendo las calles tan características de Buenos Aires en las que se proyectaban los relatos”. “Es una especie de expulsión sutil, no dicha”, alertó.
Malaguti, por su parte, expresó que “el devotense ama su barrio, es raro que se vaya porque tiene un sentido de pertenencia enorme, pero se siente agredido con situaciones como la feria del Distrito del Vino”. La jornada aludida por el profesor de historia se realizó el sábado 20 de mayo en la Plaza Arenales. Congregó a más de cuarenta bodegueros y veinte mil asistentes. Allí estuvieron también los integrantes de “Devoto Unido” haciendo oír su reclamo.
Las próximas charlas del Castillito (Habana 3801) serán los sábados 10 y 17 de junio a las 18.30 horas. La del 10 estará a cargo de la Arq. Magdalena Eggers y el tema será «Los cambios de Códigos y sus efectos en Caba». El 17 disertarán el Dr. Jonatan Baldiviezo y la Ing. María Eva Koutsovitis, referentes del Observatorio del Derecho a la Ciudad. ♦
Devoto Unido
Instagram: @bastadedestruirdevoto
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