Anna tiene 16 y pasó la mitad de su vida jugando al ajedrez en el CAVP. Ahora que logró el título de campeona nacional, el club la homenajea con un torneo que lleva su nombre.
Desde chicos con ventanitas entre los dientes hasta mayores que peinan canas se anotaron para participar el domingo 16 de julio en un evento que conjugó la competencia amistosa, el homenaje a la joven campeona y la celebración de los 90 años del Club de Ajedrez de Villa del Parque.
Mientras las últimas partidas mantenían concentrados a una veintena de jugadores, Vínculos Vecinales charló con Anna sobre el CAM23, el Campeonato Argentino de Ajedrez Infantil y Juvenil que se llevó a cabo en San Luis, en el campus de la Universidad de la Punta, en el mes de febrero.
— ¿Cómo fue la experiencia de haber participado en el Torneo Nacional?
— Anna: Sufrida, porque yo estaba preclasificada primera y perdí la primera ronda con una chica de Santa Fe, Floriana Salto, que estaba preclasificada tercera. Eso me metió presión porque para quedar primera yo tenía que ganar todas las partidas que quedaban y ella tenía que perder alguna. En la final fui a desempate contra esta misma chica. Jugamos dos partidas blitz que las gané y por eso me quedé con el título.
— ¿Qué significa “partidas blitz”?
— Anna: Son partidas rápidas en las que tenés tres minutos para hacer una jugada y cada vez que juegás se te agregan dos segundos. Es muy poco tiempo y por eso hay muchos errores.
— ¿Cuál fue la partida más difícil?
— Anna: La sexta, que jugué con Sofía Brito (también de Santa Fe). Ella estaba preclasificada segunda y yo tenía que ganarle sí o sí, porque si me ganaba o me empataba quedaba primera ella. Nosotras habíamos jugado un montón de veces y todas las partidas habían sido tablas (empate), o sea, nunca ninguna le había ganado a la otra. Y esta vez tuve que salir a ganar.
— ¿Y cuál fue la dificultad de la partida?
— Anna: Que las dos en el momento más crítico teníamos mucho apuro de tiempo. Yo tuve que jugar a atacar, cuando no soy una persona de ataque. Empecé a tirar todas las piezas y bueno, algo me salió. Pero en realidad no era bueno lo que hice.
— ¿Te acordás un movimiento?
— Anna: Alfil H4, que es una jugada que no podés hacer en una partida buena. No era buena la jugada y ella se me defendió muy bien, pero terminé ganando porque ella tenía apuro de tiempo y se colgó, se puso nerviosa. Había mucha presión.”
Actualmente, Anna cursa cuarto año en el Normal 1, Lenguas Vivas. Para cuando termine el secundario, duda si seguir Física en la UBA o Ciencias de Datos en la UTN. En el ajedrez, su próximo objetivo es convertirse en “Maestra Fide”, para eso tiene que llegar a acumular un puntaje de 2100. ¡Está cerca! Su puntuación actual es de 1980.
— ¿Qué les dirías a los chicos que están empezando en el ajedrez?
— Anna: Tal vez muchos se desmotivan cuando van a torneos y pierden. Yo en los primeros torneos que iba perdía todas las partidas, era muy mala. Pero seguí yendo, algún día gané un trofeo y después me empezó a ir bien. Entonces les diría que si uno no se rinde, en cualquier cosa que haga, tiene muchísimas chances de salir exitoso. ♦
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