Si estás pensando en escaparte unos días de Buenos Aires y te gusta la milonga, te presentamos a “Senderos de Tango”. Sus destinos son bien turísticos: Mar del Plata, Merlo, Mendoza, Carlos Paz, Mina Clavero. La propuesta es viajar y bailar. Tomar clases, tomar sol, y milonguear. Vínculos Vecinales conversó con Oscar Díaz, el responsable de la movida.
― ¿Cómo surgió la idea de estos viajes temáticos?
― Yo trabajaba en Concordia, Entre Ríos, vendiendo insumos de computación. Viajaba todas las semanas y cuando estaba allá iba a bailar tango. Me hice de muchos amigos y cuando dejé ese trabajo seguí en contacto con ellos. Una vez estaban organizando una milonga linda y me dijeron: “¿por qué no venís con tus amigos de Buenos Aires? Bueno, invité a uno, a otro, y en una semana ya éramos como diez. Dije “voy a averiguar cuánto sale un micro”. Averigué, lo promocioné, y nos juntamos 33 personas. En Concordia nos alojamos en el mismo hotel donde yo me quedaba todas las semanas. Así salió la primer experiencia turística de viajar y bailar tango. Cuando terminó yo dije: “acá hay algo interesante”. Eso fue en 2019.
Oscar tuvo que esperar a que pasara la pandemia y ni bien se pudo volver a viajar organizó un tour a Mar del Plata. Ahora ya lleva hechos veinte viajes en los que se prendieron miles de personas.
Todos tangueros
Entre los viajeros, dice Oscar, “hay muchos matrimonios, muchos amigos, y los que van sueltos nosotros les armamos habitaciones juntos. Los que no son amigos enseguida se hacen.”
Oscar no deja de sorprenderse cómo crecen los vínculos entre viaje y viaje: “Cuando yo empecé no pensaba que iba a pasar eso. Me encuentro en milongas a gente que no se conocía antes de viajar y ahora se ven, salen juntos. Son increíbles las amistades que se arman”, y aclara: «lo que sí hay que destacar es que somos todos tangueros».
Durante el viaje hay clases a cargo del bailarín y profesor Sandro Almirón (también anfitrión en Devoto Tango Club), acompañado por la bailarina y profesora Mónica Ponce. Sandro también es el animador de las milongas de Senderos de Tango, cosa que “sabe hacer muy bien”, dice Oscar.
El costo del viaje es “bastante accesible”, dice Oscar, que tiene en cuenta la realidad del país. El servicio de hotelería es de excelencia. Oscar consigue buenos precios gracias al tamaño de los contingentes que lleva. “Cualquiera de nuestros pasajeros que ingrese a la página del hotel y vea los valores, se va a encontrar con que no tienen nada que ver a lo que paga con nosotros”, asegura.
Próximos destinos
Senderos de Tango cerró el 2025 con un viaje a Mar del Plata, que colmó todas las plazas disponibles. El grupo se alojó en el Spa República y fue a bailar a los clubes Español y Pueyrredón. Fue un tour de cuatro días, tres noches. En abril los espera la ciudad de Merlo, en San Luis, donde la última vez llevaron a 290 personas: fueron en cinco micros y ocuparon todos los hoteles de la cadena Cana Blaya.
En 2026 la cosa en Merlo será para alquilar balcones: habrá festival y campeonato de tango, con bailarines que irán desde los cuatro puntos cardinales. Más adelante será el turno de Carlos Paz, Mendoza y, si todo va bien, tienen planes de sumar Bariloche. «Uno hace publicidad pero la mejor publicidad es la que nos hace la gente que viajó. Ellos son los que después nos traen otra gente», dice Oscar sobre el éxito de la convocatoria.
Senderos de Tango
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