En la esquina de Gavilán y Camarones (donde alguna vez hubo una tapicería) funciona desde hace un año y medio un bar cuya propuesta despunta en el barrio por varias razones. Una es que, de martes a domingo, todos los días alrededor de las 20 horas se presenta un show en vivo -que puede ser de rock, de jazz, de blues, de folclore y hasta de stand up- que los clientes pueden disfrutar sin cargo, bebiendo quizás una cerveza de 580 centímetros cúbicos que en horario de happy hour solo cuesta cien pesos. Estamos hablando de Gavilán Bar, un espacio de cuidada estética “industrial chic” donde además de la música y las cervezas se lucen las exposiciones itinerantes de fotografía y pintura, así como la carta en la que se ven desde clásicas hamburguesas hasta opciones vegetarianas.
La idea nació de la confluencia de intereses de Alejandro Cecchini, que andaba buscando locial para iniciar un proyecto gastronómico, y su papá, quien trabajó toda su vida en telecomunicaciones, aunque siempre con una pata en la música. “Yo traía en la cabeza la idea de crear un buen lugar de encuentro en el que la gente se sienta cómoda, donde todo esté pensado para que los clientes disfruten y con precios razonables”, explica Alejandro.
Después de buscar durante mucho tiempo encontraron este local con ochava, que estaba destruido y recién después de dos años pudieron recuperar, conservando y reparando algunos elementos como los pisos de mosaico, el precioso techo de bovedilla y las ventanas originales. “Yo vivo en Caballito y mi papá en Villa del Parque, solemos movernos en esta zona. Pero en realidad nunca nos importó tanto la ubicación del lugar. No queremos que solo entre la gente que de casualidad pasa por la calle, sino que nos vengan a buscar”, confiesa y asegura que de algún modo ya lo están logrando, porque clientes de toda la ciudad están descubriendo la propuesta y otras ventajas del barrio, como la posibilidad de estacionar sin problema y a cualquier hora.
“De acá a algunos años nos gustaría estar entre los mejores bares de la ciudad. No digo que lo estemos logrando hoy -aclara-, pero esa es la intención. Por eso es que no manejamos el bar solo como un negocio. Por supuesto que queremos ganar dinero, pero para ganar dinero hace falta tener primero una muy buena propuesta”.
Sobre la dignidad del artista
Hasta enero de 2021 Gavilán Bar tiene todas sus noches ocupadas con diferentes artistas. Y eso, según Cecchini, tiene que ver con algo tan sencillo como que “no hay para los músicos una mejor oferta para tocar en toda la ciudad. Acá tienen sonido de alta calidad, con un sonidista que ponemos nosotros y que se encarga de armar y desarmar todo. También disponemos de equipos, no tienen que traer nada. Y les damos una cena gratis: se sientan, comen y toman algo tranquilos. Si quieren pueden tocar al sobre o a la gorra. Entendemos y respetamos la dignidad del artista, igual que la del cliente y la del personal. A todos buscamos cuidarlos”. El bar está además buscando muralistas para que expresen su arte en algunas de las paredes del local.
En el piso de arriba hay terraza que en una parte está semicubierta, mientras que en la otra se pueden ver las estrellas, las casas bajas de la zona y a pocas cuadras, el estadio de Argentinos Juniors. En cuanto a la propuesta gastronómica, Cecchi subraya que “todo lo que servimos lo elaboramos nosotros en el momento, nada es comprado ni pre hecho. Por eso estamos siempre recalcando que no es un lugar de comida rápida. La atención sí es muy rápida, pero por ejemplo las hamburguesas son muy grandes, y tardan en hacerse. Tienen su arte. Si alguien está apurado, entonces se equivocó de lugar”. ♦
Gavilán Bar queda en Gavilán 1998, esquina Camarones. Está abierto de martes a domingos de 11 a 1 am (viernes y sábados hasta la hora que la gente quiera quedarse).